En la gran mayoría de versiones de Windows nunca recomendaría actualizar un sistema operativo directamente (de W7 a W8, o de XP a W7), siempre formatearíamos el disco e instalaríamos el Windows en limpio. No obstante después de comprobar como funciona Windows 8 y Windows 8.1, recomendaría la actualización sin ninguna duda, para sistemas muy personalizados, con infinidad de programas y características instaladas.
Os detallo la sencillez de actualizar de Windows 8 a Windows 8.1, sin necesidad tan si quiera tener que grabar el sistema en un CD o USB para arrancar a través de él.
Lo primero que debemos hacer es tener la ISO de Windows 8.1 de la misma versión que tenemos instalado en nuestro pc y tan solo pulsar botón derecho y Montar.
Ahora nos dirigimos a Equipo y accedemos al DVD montado de la imagen .iso, ejecutamos el setup.exe y empieza el proceso de actualización.
Como hemos visto avanzamos como si de una instalación desde el arranque se tratase hasta el punto en que nos pregunta si queremos Conservar los archivos personales, aplicaciones y configuraciones de Windows. Tal y como comentaba anteriormente esta opción nos permitirá mantener nuestro Windows con las aplicaciones y configuraciones sin tener que reinstalarlas y seguiremos la instalación.
Por supuesto el pc se reiniciará varias veces hasta el momento donde nos solicite la previa configuración de nuestro Windows.
Una vez terminada toda la configuración y accediendo al pc ya podemos observar que disponemos de la nueva versión de Windows 8.1.
Espero que os haya servido, si tenéis alguna duda comentar el post y haré lo posible para ayudaros.